El técnico del Atlético de Madrid, Diego Simeone, valoró lo hecho por su equipo en la temporada y alabó a sus futbolistas tras la derrota 4-1 en la final de la Liga de Campeones ante el Real Madrid.
El equipo "colchonero" estuvo a un par de minutos de ganar el torneo continental por primera vez en su historia, pero una ráfaga del Madrid lo dejó sin nada.
"En el segundo tiempo el Madrid fue mejor, no nos permitía salir. Tengo amargura por no haber podido llegar al objetivo que todo el mundo esperaba, pero la tranquilidad me sobrepone", dijo Simeone en rueda de prensa tras el partido.
"Este partido no merece una lágrima, cuando se entrega la vida, no hay nada que decir. Estoy orgulloso de los jugadores y de la afición, con humildad hemos llegado hasta aquí", agregó el "Cholo".
Simeone fue expulsado a un minuto del final del partido, al saltar al terreno de juego tras el cuarto gol del Real Madrid en la prórroga, y buscar al central francés Raphael Varane.
Se había encarado David Villa por un pique con Varane, cuando Simeone saltó al terreno de juego a un minuto del final y se desató una trifulca entre los dos equipos.
Iker Casillas se llevó a Varane, que fue amonestado por el colegiado del encuentro, el holandés Björn Kuipers, que expulsó al técnico del Atlético de Madrid.
Simeone protestó al árbitro desde la conclusión de los 90 minutos reglamentarios por los cinco añadidos en los que llegó el tanto del empate de Sergio Ramos, con un testarazo en el 93.
El argentino, ídolo "colchonero" por integrar el equipo que en 1996 ganó el doblete de liga y Copa del Rey como jugador, le dio un nuevo impulso al Atlético en su exitoso periodo como entrenador.
Desde su llegada al banquillo "colchonero", Simeone ganó una Copa del Rey, la liga hace siete días, una Liga Europa y una Supercopa de Europa.
"Los hinchas deben estar orgullosos de la excelente temporada del Atlético de Madrid, hay que lavar las heridas, prepararse y el año que viene seguir molestando y compitiendo como hicimos este año", destacó.
