Aunque asegura vivir menos nervioso el juego, el Cholo admite que lo obsesionaba ganar en River. Su agarrada con Carrizo, Buonanotte y el escudito en el celular...
Cuánto hace que tenés el escudo de River en la pantalla del celular?
--Me lo puso el pibe mío, el del medio, Gianluca, hará un mes y medio. Y... nos hicimos todos de River.
--¿Y cómo es salir a la calle al otro día de ser campeón con River?
--No sé, si estuve todo el día con ustedes, ja. Pero recibí mil llamados, muchas felicitaciones. Y la verdad es que me siento raro, contento, tranquilo. Porque le respondimos a la gente que confió en mí siendo muy joven. La apuesta por parte de ellos fue fuerte. Y estoy tranquilo por haberles podido dar lo que buscaban. Y después, tengo una gran alegría porque veo a los jugadores contentos, porque más allá del campeonato en sí, hemos dejado cosas en ellos en cuanto a incorporación futbolística, algo que va más allá del título.
--¿Te sentís raro porque estás tranquilo?
--Sí, cuando terminamos algo importante como el campeonato me da bronca que se acabe rápido. Porque está la explosión, la alegría, el festejo, pero llegar al momento en que los jugadores están como están hoy, es dificilísimo. Te queda una sensación rara, como si te sacaran algo grande.
--Parecías obsesionado por ganar en River.
--Sí, la verdad que sí. Y seguramente estaba pasado de vueltas. Es algo personal para mejorar. Es que fue una lucha muy grande entre lo que busqué y lo que nos encontramos, que fue un idea muy clásica. Diego (Buonanotte) al principio decía que no lo entendía, Matías (Abelairas) que le pedíamos una agresividad que al principio no tenía... Y te ponés ansioso, más con las necesidades de River. Pero no le demos más vueltas. Sin excusas: debo mejorar.
--¿Te pasó que algún jugador te recriminara por tus gestos al costado?
--No. Lo más lindo es la relación con los jugadores.
--Igual, no te ponías loco cuando Carrizo tiraba el taquito en el área...
--Ja. Una vez le dije "fijate que Calderón no te la afanó por poco", o "con Lanús te resbalaste". Hay un mensaje que te mando: cuidado. Pasan cuatro partidos y podés hacerla de nuevo. Si te acostumbrás, hay una en que la cagás. Hay que leer los momentos. Ves, con él una vez discutimos, en el 5-0 con los peruanos. Carrizo sale gambeteando y no la tira al lateral, quiere hacer una de más. Entonces yo desde lejos le digo "¿qué hacés?". Y él me contestó con un gesto de fastidio. No al primer día, porque no sirve, pero después lo hablamos. El me dijo que entendía que había provocado mi reacción y yo le dije que los grandes arqueros son los que eligen bien.
¿Para qué te van a hacer un gol innecesario en un 5-0? "Vos no tenés que tener grandes errores, porque los grandes arqueros sólo tienen errores".
--A Buonanotte lo retaste en la pretemporada.
--Yo no quiero cambiar la historia de River. Ahí te tiré el título, ya está, ja. Hay otras maneras de jugar y el 10 tiene que correr. El 9 igual. Porque si vos mirás al Chelsea, al Liverpool, al Real Madrid, corren todos. Higuaín acá jugaba de 9 y en el Real Madrid juega de carrilero por izquierda. Te tenés que adaptar a lo que es el fútbol mundial...
--Eso le dijiste al Enano.
--Más o menos, pero con otras palabras, ja.
