domingo, 3 de junio de 2007

"El cuchillo es nuestro"



Resultó una reacción espontánea y significativa, con un alto contenido emocional. Una actitud que marcó una gratitud tan plena como genuina de su parte. Fue el 7 de nayo del 2006, en la fecha 18 del Clausura. Tras convertir de cabeza su primer gol a River (Racing ganó 2 a 0), en el Cilindro, Maxi Moralez iniciaba su festejo con una carrera que culminaría a un metro del banco de Racing. Corrió toda la cancha a lo ancho, se detuvo frente a Simeone y le dio la mano afectuosamente. "Gracias", le dijo el por aquel entonces DT de la Academia. "No, gracias a vos", le contestó el jugador.

Con esa acción que apenas duró un instante, Maxi había trasmitido su agradecimiento a un hombre que le dio un impulso sustancial hacia su futura consolidación como titular. Hoy, por segunda vez, el Enano enfrentará al Cholo de Estudiantes. Y la enseñanza que incorporó de él intentará aplicarla más que nunca: "Como decía él, Racing tiene que jugar este partido con el cuchillo entre los dientes. Mañana (hoy) el cuchillo es nuestro. Hay que poner y poner, y jugar cuando podamos. Tenemos que sacar los 9 puntos que quedan para arrancar el próximo torneo más tranquilos con el promedio del descenso. Nos estamos jugando cosas muy importantes", asegura Maxi.

—¿Qué te marcó de él?

—Varias cosas. Por ejemplo, antes de jugar mi segundo partido de titular contra Lanús, me pidió que estuviera tranquilo y me dijo que si seguía jugando así me iba a ir bastante bien en el futuro. Esas palabras me sirvieron muchísimo, me dieron una gran confianza para el futuro. El me hizo crecer como titular y eso no me lo voy a olvidar.

—¿Cómo era tu relación?

—Bien, bien, me llamaba Enano, como todo el mundo. Y me daba muchos consejos. Aprendí bastante. Sabía mucho del juego.

—¿Qué te pedía?

—En esa etapa no le ganábamos a nadie. Había que ganar como fuera. Me pedía que jugara, que atacara, que pensara siempre en el arco rival. Me gustaba que fuera ofensivo y eligiera jugadores de buen pie.

—¿Hubo algo que te llegó a sorprender de él?

—Sí, me impactó que sabía mucho a pesar de que en aquel momento tenía poca experiencia como técnico.

—¿Creés que Blanquiceleste debió retenerlo en vez de dejarlo ir?

—A nosotros, sobre todo a los más chicos, nos bancó bastante. Me hubiera gustado que siguiera, merecía quedarse. Desde que se fue quiero que le vaya bien. Me trató bárbaro primero como compañero y también como entrenador. Me hubiese gustado mucho que lograra en Racing lo que hizo en Estudiantes, donde fue campeón.

Cholo Simeone

Cholo Simeone

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